(Diálogo ficcional, hallado imaginariamente entre sus cartas)
Vincent: Mi Gauguin te olvidaste de tu viejo amigo Vincent, espero que las brisas acariciadoras de Tahití te tengan ensoñando y creando, pintando entre paisajes las armonías cromáticas del mundo. Extraño tus pinturas, ocurrencias e innatas coqueterías a deidades, un gran abrazo amigo mio!
Paul: Mi querido Vincent. Sabías que debía partir para encontrar tus cielos remolineantes en otras tierras. No te olvido porque estoy en procura de aquello que alguna vez me mostraste con alguna pincelada que era también viento y agua y fuego quemando las pupilas. Un brindis a tu salud!
Por: Silvana Farley y Juan Noreña.
sábado, 10 de septiembre de 2011
lunes, 5 de septiembre de 2011
PUERTAS ANAMÓRFICAS
Puerta anamórfica. Intervención in-situ. Carboncillo, lápiz y trementina sobre pared. 210cm x 90cm. Medellín: Taller 7, 2009.
Supervivencia del punto. Anamorfosis sobre piso y pared. Lápiz y acrílico. Medellín: Casa Plazarte, 2008.
El cuadro siempre ofreció al espectador una vista frontal, es decir, el espectador enfrente del cuadro. "Los Embaladores" de Hölbein hace una ruptura con esa mirada al introducir el anamorfismo y forzar el dislocamiento del observador. Puertas anamórficas son un intento por esquivar la mirada frontal y mostrar una mirada de soslayo, casi un guiño del ojo, para entrever el espacio según la pintura.
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